Customizar el management ¡para obtener mejores resultados!

Imagen:cosminpana.com

 

Como sabe cuando hablamos de management estamos hablando del arte de dirigir y gestionar empresas, estamos hablando de las múltiples posibilidades que existen de orientar los comportamientos de las empresas hacia la consecución de objetivos. Es sin duda un tema capital para todas las personas que tengan aspiraciones de éxito en el desarrollo de productos o iniciativas empresariales, es fundamental para todos/as aquellos/as que pretendan o sean emprendedores. En los ámbitos propios del management podemos incluir aspectos como las habilidades directivas, aspectos referentes al liderazgo, optimización de tiempo, incluso concepción de modelo de negocios, aspectos organizativos de las empresas, sistemas de control, etc., en definitiva es un tema amplio, diverso y propenso a múltiples matizaciones e incluso opiniones. Vamos a ver el management en este post, desde la perspectiva y propuesta que nos plantea sus fuentes más prolijas y valoradas, expondré mi opinión sobre la adaptabilidad de este arte a nuestras empresas y a sus dirigentes.

Llevo más de 20 años enseñando y trabajando en temas relacionados con el management. Siempre me he planteado, y a la vez que he intentado, optimizar los recursos de esta disciplina, para alcanzar mejores resultados bien para mis alumnos/as, bien para mis clientes y sus empresas. Soy un apasionado del arte de dirigir empresas, poseo mi propio modelo de management que he ido construyendo y perfilando con el paso del tiempo, el conocimiento y sobretodo la experiencia de directivos y empresas, de hecho creo que he conseguido que este modelo de muy buenas respuestas y buenos resultados. Obviamente no es perfecto, pero si deciros que surgió de la necesidad de adaptarse a tipos de empresas concretos y personas con diferentes valores y capacidades. Esto fue consecuencia de las aportaciones que conocía y que me llegaban desde muy diferentes fuentes. Siempre vi ciertas carencias en todas las propuestas y estudios que nos llegaban desde otros mercados, ámbitos, zonas geográficas y es que parecía obligado dar por sentado la conveniencia y solvencia profesional de los estudios y las hipótesis que publicaban, incluso se puede poner en tela de juicio tu profesionalidad si no implementas estos procesos de trabajo, pues lo “venden” como válidos para cualquier empresa en general. El aval profesional que poseía el modelo de management o la hipótesis de trabajo propuesta, no era otro que provenía de tal autor leidísimo, gran vendedor de libros, o lo recomendaba tal consultora reputada tras un estudio riguroso, o porque lo implantó el gurú de turno en su empresa con magníficos resultados. Estas circunstancias me mostraron que no solía ser eficaz en sus pretensiones todo lo que nos vendían estos colectivos y que por lo tanto no lograban siempre buenos resultados para todas las empresas. Había demasiado “humo”, demasiada generalización, demasiada “fría” estandarización.
Siempre me he preguntado, sí cuando trabajamos en temas relacionados con el marketing, el cliente al que nos dirigimos es la fuente de toda toma de decisión y orientamos nuestras actuaciones a sus necesidades, deseos y características, sí cuando realizamos un plan estratégico, este lo realizamos en función a las características de los mercados a los que se dirige la empresa y los recursos y características de estas, sí cuando trazamos un plan financiero e imponemos un procedimiento de trabajo, personalizamos o lo customizamos a las peculiaridades de la empresa, entonces ¿porque todos los avances e innovaciones de management que vamos conociendo intentamos implementarlos según nos sugiere la fuente de la que tomamos la mejora?.
La experiencia nos demuestra de manera muy frecuente, en este sentido, que herramientas, filosofías, ideas, actuaciones, programas de management que han obtenido magníficos resultados en determinadas organizaciones o determinadas culturas , una vez se extrapolan y se implementa en otros “hábitat” de características diferentes, simplemente fracasan!. Como ya saben pasó con los círculos de calidad de Toyota cuando se aplicaron tal cual en EEUU, cuando se practicaron tipos de liderazgos anglosajones en países asiáticos, cuando se implementaron sistemas de control teutones en los países latinos.
Todo esto me hizo pensar, he intenté llegar un poco más allá de las conclusiones que extraían algunos autores, gurús y directivos nacionales, ante estas situaciones de fracaso, que no iban mucho más allá de que no eran eficaces las innovaciones importadas, ante los pobres resultados obtenidos con esas nuevas técnicas, filosofías, herramientas o formas de entender la dirección. Como os digo, siempre pensé que el estatus o valor que en ocasiones le otorgamos a la generalización o estandarización, puede llevarnos a cierto error. No todo se puede generalizar, o aplicar a cualquier escenario, no todo es estandarizable, sin riesgo de perder eficacia. La innovación en cualquier ámbito es aplicable siempre y cuando se adapte a los diferentes escenarios que se le plantee, de tal forma que en ocasiones una innovación sea de tipo que fuere, puede no obtener los resultados previstos, pues no da respuestas a las necesidades de la organización a la que se le va a aplicar. O dicho de otro modo, el management que generalmente importamos de EEUU, de países anglosajones, o bien del lejano oriente, no podemos pretender que obtenga los mismos resultados en nuestro mercado que de donde procede y para el que fue creado y/o estudiado, pues no está pensado o creado bajo parámetros y variables propias de nuestras empresas. Es Por ello, que creo que las personas que nos dedicamos a la potenciación, aumento de competitividad y mejora empresarial a través del management, debemos tener muy presente esta circunstancia, respetarla y actuar en consecuencia. De tal forma que cuando nos toque enseñar o trabajar con directivos de empresas para optimizar su management, las innovaciones que incorporemos se deben customizar a las características, necesidades y aspiraciones de los valores de la empresa y de los propio responsables de la dirección de la empresa. El modelo de management que no se pueda customizar a diferentes tipos de organizaciones y personas, no es un modelo eficaz, o al menos no es generalizable.
Bien pues siendo coherente con esta intención de dar respuestas a la adaptación de modelos de management según el tipo de empresa y de personas directivas, no hace mucho que he diseñado una iniciativa, en forma de organismo, que está en sus primeras etapas de “camino” y persigue como objetivo generar un management, sí, generar un management autóctono para mi autonomía y para su tejido empresarial. Se trata de customizar las innovaciones que vayamos conociendo y generar las nuestras propias en el ámbito del management para estas empresas. Pretende, este organismo, dar respuestas eficientes y efectivas en este ámbito de la dirección y la gestión, a empresas que están en diferentes momentos evolutivos desde el punto de vista del management, así como igualmente dar respuestas , herramientas, aplicaciones, soluciones en definitiva!, a todo un abanico de directivos y personas involucradas en la dirección organizativa, que poseen personalidades diversas, encuadrados e influenciado por un ámbito geográfico que tiene sus propios valores, su propia forma de ser y una población a la que dirigir con una forma de ser particular. Bueno pues ese es el reto actual en el que me muevo, valoro la iniciativa como muy interesante, novedosa e innovadora, pero creo que sobretodo es una iniciativa que generará un valor añadido para las empresas a las que se “beneficiarán” de sus resultados, así como para sus responsables. Estoy convencido de que este organismo que propongo, conseguirá aumentar de manera rápida y eficiente la competitividad de estas empresas y las capacidades de sus directivos. En la actualidad estoy en contacto con organismos públicos y con empresas privadas, así como con colectivos que creo deben formar parte de esta experiencia. La recepción de la iniciativa ha sido valorada muy positivamente por todos ellos, aunque sé que es difícil llevarla a “buen puerto” donde podamos comprobar sus efectos. Estamos como estamos, y no siempre se desarrollan las actuaciones que dan respuesta a las necesidades prioritarias. De todas formas ya os contaré en queda todo esto. De todas formas, deciros que toda vuestra ayuda se aceptará gustosamente, siempre que vaya en beneficio del proyecto.
Para concluir, comentaros que como se detalla a lo largo del post, la personalización de medidas innovadoras en la empresa se plantea como ineludible para alcanzar buenos resultados, de tal forma que el management no escapa a esta premisa. Esto no quiere decir que todo lo que no se innove a nivel particular para una empresa en concreto, no ha de servir o ser válido para ella, no, lo que quiere decir es que cualquier cosa que deseemos implementar en una organización, la que sea, se ha de adaptar a las características, peculiaridades de la empresa, teniendo como referencia continua sus valores, procedimientos, objetivos, políticas, etc., y que además, debemos tener presente las personas que las van a aplicar, pues sin duda el proceso de implementación se verá afectado por su personalidad, por su forma de dirigir, por su manera de entender el modelo de empresa a seguir, y todo ello matizará o condicionará el resultados de las mejoras introducidas. Con lo que de no ser así, es decir, de no customizar la innovación en management a la empresa y a sus directivos, es muy probable que la mejora con la que pretendemos alcanzar metas altas, produzcan los efectos de un caos organizativo que genere entre otras cosas un mal clima laboral, produciendo problemas de eficiencia y de eficacia. Piense y aprenda de forma global, sí, pero actúe de forma local respetando las necesidades, idiosincrasia y características de su empresa, así como de su propia gente, con la que persigue alcanzar los objetivos. Debemos customizar el management para lograr niveles de eficiencia más altos. No todo vale para todos.

Rafael Cera
@rafacera

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